6º Principio de la Agricultura Natural.
La importancia del bosque Natural de alimentos (bNa)
El conocimiento, la recreación y la preservación del bosque Natural de alimentos (bNa) como el hábitat equilibrado de un Ser humano Natural y Consciente.
Apoyado en la filosofía que distingue ‘lo natural’ de ‘lo artificial’, como dos extremos reconciliables en sus templanzas, Jamchen introduce este sexto principio (Bosque natural de alimentos) con la intención de dar posibilidad a prácticas agricultoras intermedias que puedan ser concebidas desde un ámbito de conservación y restauración de la fertilidad natural de la tierra que contenga una sostenibilidad auténtica y completa en todos los elementos, con sus diferentes expresiones naturales, incluidos los seres vivos.
Los bosques naturales son la causa primera de la fertilidad natural de la tierra y del equilibrio del agua y de todos los demás elementos del ecosistema, y es, por esta razón principal, que el bosque Natural de alimentos pretende aunar la convivencia entre ‘lo silvestre’ -bosque natural-, que no siempre es alimentario y que garantiza la fertilidad de la tierra y ‘lo alimentario’ -bosque de alimentos-, que pocas veces es silvestre y que no garantizan ni la fertilidad natural ni el equilibrio de los elementos mencionados.
"Una relación armónica entre Ser humano y la naturaleza que lo rodea y de la cual forma parte"
En las páginas 186-190 de Vida Natural Consciente, Parte II, el autor explica que:
“la sostenibilidad entendida como aquella capacidad que tiene un ecosistema de mantenerse, con el transcurso el tiempo, en términos de productividad, biodiversidad y ecología”, implica un imposible en tanto que progreso económico y social, si se entienden tales conceptos como sostenibilidad del humano por encima de las leyes de la Naturaleza.
La sostenibilidad que él plantea como auténtica y completa, es “aquella que es natural y consciente, lo que conlleva a entender que las intervenciones del humano en la naturaleza, han de estar concebidas con un equilibrio de voluntades entre lo silvestre y lo humano, generando, con ello, una relación armónica entre Ser humano y la Naturaleza que le rodea y de la cual forma parte.
Se entiende que “ ‘Natural’, que tiende a ser sostenible para la Naturaleza -y se rige según su ley- y ‘de alimentos’, que tiende a ser sostenible para el Ser humano -y se rige según la ley humana-, componen las dos partes extremas.
Estas, cuando son templadas por el humano, se integran en lo que llamamos bosque Natural de alimentos, e implica la sostenibilidad de las dos partes, que es la sostenibilidad del todo, desde el punto de vista de la Agricultura Natural.”
"La naturaleza se encuentra concebida sin una separación radical con el Ser humano"
“Con este principio en la Agricultura Natural (A.N.), las dos cualidades unidas en su práctica, se mantienen en un saludable orden de biodiversidades y de convivencia, dentro de una misma voluntad donde la Naturaleza se encuentra concebida sin una separación radical con el Ser humano.
Sin embargo, nuestra mente tiende a separar, conllevando una especialización y un cultivo extensivo excesivos que tienen la mirada puesta hacia la productividad, por ello necesitamos comprender la relaciones posibles de lo que es separado para que puedan ser unidas.
El trabajo, en la práctica agricultora natural, consiste en templar el mundo natural silvestre que se expresa, a la vez que templamos también el mundo alimentario humano de nuestras intenciones productivas.
"La idea principal es que el bosque Natural de alimentos sea concebido dentro de un sistema de intercambio de necesidades"
De esta manera, un bosque Natural de alimentos se configura con una cualidad de templanza, dentro de las zonas de cultivo y sus diferentes unidades paisajísticas, con su aprovechamiento de alimento humano -incluido madera, fibra y otras necesidades básicas- y su alimento silvestre -de no aprovechamiento humano-.” Jamchen ha aproximado un intervalo de silvestre-alimentario, dentro de cada unidad paisajística, de entre un 40% a un 60%.
La idea principal es que el bosque Natural de alimentos sea concebido dentro de un sistema de intercambio de necesidades donde el ser humano no desgasta el ecosistema pero aprovecha también los recursos naturales sin llegar a la productividad máxima destructiva que implica la explotación de la naturaleza.
Un camino de respeto y reciprocidad perfecta, que nos da como resultado un hábitat adecuado para un ser humano que quiere vivir en Consciencia y Naturaleza.
Todo el trabajo que implica la recreación de un bosque Natural de alimentos, se encuentra unificado con los demás principios de la Agricultura Natural y está basado en una actitud humana que pone su mirada en la conservación de los bosques naturales que ya existen y en la reparación y regeneración de los ecosistemas que han sido degradados a base de malas prácticas.
"Los árboles silvestres quienes generan la lluvia y guardan el agua"
“El bosque Natural de alimentos lo abarca todo, tanto las zonas coberturas vegetales bajas, como las zonas de arboleda y puede expresarse de múltiples formas, dependiendo de la idiosincrasia del lugar en cuestión o de las motivaciones personales del agricultor natural. La mayor parte de las plantas de alimento de cultivo necesitan sol, no es posible imaginar un mundo alimentario sin esa luz y es por esa razón que han sido destruidos la mayor parte de nuestros bosques.
Debemos cambiar esa mentalidad que persigue el sol bajo toda circunstancia y donde el árbol no frutal es enemigo del agricultor, pues, lo que perseguimos es lo que finalmente obtenemos, y cuando las tierras de labor fueron abandonadas, se desertificaron, el sol es abrasador y no hay lluvia. Recordamos que son los árboles silvestres quienes generan la lluvia y guardan el agua en el seno de la tierra.
"El bosque natural de alimentos contiene la luz del prado, pues es el bosque el que permite que el prado exista"
Para poder configurar un bosque Natural de alimentos, hay que esforzarse en entender que para nuestros frutales, cereales y hortalizas, la luz del sol es tan importante como las sombras de los árboles silvestres, el agua, la tierra y el oxígeno que ellos también nos suministran y son tan imprescindibles para la agricultura. Con todo ello, cuando hablamos de un bosque Natural de alimentos, estamos hablando de un lugar de convivencia de especies, donde cada una tiene satisfechas sus necesidades de luz, agua, sol y tierra.
En una unidad paisajística de Agricultura Natural, no hay separación radical entre prado y bosque, ni extensiones enormes de prado con arboledilla dispersa, sino que ambos conceptos están configuradas dentro del mismo entorno de bosque.
El bosque natural de alimentos contiene la luz del prado, pues es el bosque el que permite que el prado exista. El prado contiene la luz del sol, pero no se encuentra solo ni está separado, ni es el fundamento. El bosque es el fundamento y la razón de nuestro alimento y el alimento de la tierra.”
"Estamos abiertos a integrar también, dentro de la unidad bosque Natural de alimentos y con las tendencias personales de cada cual, todo tipo de plantas"
Con todo ello, entendemos que cuando hablamos de bosque Natural de alimentos, no nos estamos refiriendo únicamente a la combinación pura de árboles frutales con los árboles silvestres, estamos abiertos a integrar también, dentro de la unidad bosque Natural de alimentos y con las tendencias personales de cada cual, todo tipo de plantas, tanto cereales y otras herbáceas, como hortalizas y otras silvestres de cobertura, así como leñosas arbustivas -de cultivo y silvestres-.
En el bosque natural de alimentos la diversidad es importante, pero, si la motivación personal de un agricultor es dar fuerza al cultivo hortalizas, o a los cereales, o a frutales, su preponderancia será esa, aún dentro de la diversidad.
"En Agricultura Natural no solo diseña el ser humano, también lo hace la Naturaleza"
El diseño es parte fundamental para la recreación de un bosque natural de alimentos, pero en Agricultura Natural no solo diseña el ser humano, también lo hace la Naturaleza. Es por esa razón que Jamchen habla del ‘desde adentro hacia afuera’, como forma de diseño natural y consciente:
“Esta práctica consiste en no intentar abarcarlo todo de una vez con un diseño matematizado y prescrito, pues siendo así, la Naturaleza quedaría desvalida, sino de ir recreando centros estables, desde ciertas imágenes mentales de nuestro diseño como humanos, esperando después que la Naturaleza actúe y hable y respondiendo nosotros con acciones acordes al argumento de la Naturaleza.
Cuando se realiza de esta manera, el centro se establece y va creciendo y conectándose con otros centros, conformándose, en los tiempos debidos, una unidad armónica donde Naturaleza y ser humano se comunican y mantienen una relación de respeto mutuo.
"Climax del bosque natural de alimentos"
Una vez que madura el espacio y se llega a una aproximación de climax de bosque Natural alimentos, todo queda conectado y el trabajo del agricultor se queda en mantener ese equilibrio conseguido.
En muchas ocasiones, ese trabajo implica acciones, como ciertas podas para dejar espacios libres, pero lo más importante es perder el miedo a la competencia de las especies y no considerar ‘lo silvestre’ como enemigo de nuestros cultivos, sino como el mejor de nuestros amigos.
Todas las plantas están conectadas en aires y tierras y se ayudan cuando son de la misma especie, pero, aunque nos parezca insólito, realmente con nuestra colaboración, pueden convivir armónicamente especies diferentes también con ayuda mutua entre ellos. Las plantas, en ambiente humanizado biodiverso y equilibrado, no compiten tanto como se podría pensar, sino que se dan cuenta, por sí mismas, de su condición favorable de climax”.