Como distinción al maestro Fukuoka y su afición personal al rábano daikon, hace un par de años se creó, en la Asociación Agricultura Natural España (ANE), un gabinete para investigar, en base a la experiencia con otras hortalizas, las teorías ya expresadas, y esperando pruebas en marcha colectivas directas en tierra, la domesticación natural de esta clase de rábano para climas mediterráneos.
Para poder dar resultados comparativos, según las pruebas, hasta ahora realizadas, en diferentes lugares de España, necesitamos, como mínimo, de tres a cinco años, para que cada participante pueda ir aportando datos y resultados. Nos encontramos en el segundo año, para algunos casos y en el primer año para otros. Ya algunos, nos hemos dado ya cuenta que el rábano daikon, después de su primer ciclo, ya comenzó a asilvestrarse. Sus semillas espontáneas, caídas desde la primavera, han conseguido germinar sin ningún tipo de intervención, sólo con su natural devenir.
En mi caso particular, me encuentro en el segundo año; durante el mes de julio del año pasado, un rábano germinó por su propio pie, se adelantó naturalmente a los otros, y su tamaño fue extraordinariamente superior. Los de segunda generación, plantados manualmente en agosto, siendo las mismas semillas y, aun teniendo buenas condiciones, sin embargo, crecieron muy pequeños, con lo que la pérdida de calidad genética, en esas condiciones, resultó evidente. Aunque debemos mirar todavía el comportamiento continuado, esto demuestra que el rábano daikón, en principio, la mejor época de plantación sería en finales de junio, por su natural predisposición mostrada, hasta ahora.
Continuaremos la labor de asilvestramiento doméstico. Seguiremos combinándolo con sus plantas madres, y acomodándonos, poco a poco, a lo que su naturaleza propia vaya informando.
En la foto uno, se muestra el rábano semi-naturalizado y sacado de la tierra, con sus semillas. En la foto dos, encontramos el lugar donde creció, donde he dejado algunas semillas, esperemos que salgan algunos de nuevo; he segado y acolchado. A finales de agosto, siguiendo el calendario común de los rábanos, prepararé el terreno a su lado y volveré a plantar semillas de esta misma planta. Veremos que sucede.
Juan B. Jamchen. Coordinador.
20 de Junio/2020
Abrazos desde el gabinete de daikón de la ANE